domingo, 12 de octubre de 2008

¿Cara o cruz? Cruz.

Suele decirse que todo en esta vida tiene dos caras.

El deporte no es una excepción. Tiene una cara dulce, televisiva y fotogénica, la del éxito y el deber cumplido, la de la celebración, los homenajes y las felicitaciones.

Pero también tiene una cara amarga, y la muestra con toda su dureza y crueldad cuando menos se espera.

Un deportista nunca espera encontrarse con esta tras una competición, pero es parte de su psicología saber sobreponerse a ella, saber extraer conclusiones tanto negativas como positivas y salir reforzado de la prueba. Aun así, es difícil. Es tremendamente difícil tocar fondo la mañana de un domingo y salir a hacer series el martes por la tarde como si no hubiera pasado nada.

Esta es la situación en la que me encuentro yo ahora. El debut ciclipedestre 2008-09 en Corvera el pasado domingo representó una terrible constatación de que me falta mucho aun para llegar a donde quiero llegar.

El circuito, al que los junior tuvimos que dar 7 vueltas, era casi en su totalidad por campa, tremendamente bacheada. Un tercio del circuito era llano, mientras el resto constaba de continuos repechos y descensos de no más de 100 metros y sin demasiada inclnación, aunque bastante duros con el alto ritmo y el paso de las vueltas bajo el abrasador sol que pegaba de lleno a lo largo de todo el circuito. No presentaba grandes exigencias técnicas, aunque algunas curvas se hacían complicadas al estar contraperaltadas y muy bacheadas, además de un murete en el que la mayoría debíamos bajarnos de la bicicleta para escalarlo con la bici al hombro.

Esta es la perfecta descripción de un circuito que no me va nada. Nunca en mi vida, en ningún momento, fui capaz de andar bien en un circuito bacheado. Ni en ciclocross ni en BTT.

La participación fue, para una simple carrera regional, de auténtico lujo, con los dos máximos e indiscutibles favoritos, los gemelos Jon e Íñigo Gómez Elorriaga, y otros aspirantes a casi todo a nivel nacional, como son el cántabro Míchel Vuelta, el gallego Adrián Pérez y los asturianos Aitor Graña y Alberto Lucas.

Es curiosa la facilidad con la que ganan los gemelos. Su táctica es siempre la misma, sencilla pero aplastantemente efectiva.

Íñigo se escapó desde el primer metro, con un ritmo vertiginoso. No le volvimos a ver en toda la carrera. Jon se dedicó a frenar el grupo, azotado por ataques bastante constantes de Aitor Graña, Míchel Vuelta o yo mismo, mientras los otros componentes, Alberto Lucas y Adrián Pérez, permanecían más a la expectativa.

Durante la primera mitad de carrera aguante en el grupo, casi todo el tiempo a cola y sufriendo. Al tercer paso por meta me dijeron por fin cuántas vueltas me faltaban. Cuatro todavía. En ese momento, aun antes del ecuador de la prueba y ya totalmente vacío, me dejé ir, esperando por otras ocasiones mejores y aún sufriendo entre los terribles baches. No lleguá a pasar por meta otra vez, ya que un tornillo de mi sillín dijo basta y este se quedó mirando al cielo. No importaba, simplemente adelantó lo inevitable.

En esa vuelta se rompió todo, Jon y Aitor se fueron solos, llegando 2º y 3º en este orden. Adrián llegó 4º por detrás, en solitario, a una veintena de segundos del podio. Míchel, otro que tampoco suele ir bien en circuitos bacheados terminó 5º, y Alberto 6º, pagando los esfuerzos en su debut en una prueba de 40 minutos, ya que era su primera carrera como junior.

Jose Luis Alonso, otro ex de El Pedal, también debutante, terminaba 8º tras una salida de cadena en el primer giro.

Otro que sufrió la cara amarga, la que golpeó inplacablemente al valiente superclase Miguel Ángel Taboada, que a sus 42 años se atrevió con los élites, siendo lastrado por repetidos pinchazos y problemas mecánicos. La misma que atacó al carismático Borjina en forma de rotura de sillín en su debut como senior.

No fue un buen día tampoco para los debutantes en sub 23, como Pedro Solís, Andrés Pérez, Gonzalo de Luis o Adrián González. El ritmo de esa gente fue demasiado para ellos, aunque seguro que mejorarán con el paso de las carreras.

En cambio, muchos otros se llevan de Corvera una lectura muy positiva. De menor a mayor: el infantil Jaime ¿? consiguió una buena victoria por delante de Alicia González, corredora que apunta incluso más alto que su hermana, que debutó en féminas élite con podio incluido.

En cadetes Asturias tiene este año a una gran generación. Ante un rival de peso como Kevin Suárez, que hace una semana en Muskiz terminara 7º, Pablo Fuentes y Abel García supieron imponerse. Y Luis Junquera, de primer año, vio que puede estar cerca del cántabro, un resultado más que interesante, sobre todo de cara a la siguiente temporada.

En la prueba élite y sub 23 muchos terminaron contentos. Isaac Suárez por la remontada y la victoria, Mauro por estar peleando con este mihura hasta el final, Joseba León por confirmar que este año va en serio, Toti por haber peleado de tú a tú con gente de este nivel tras un año un poco más flojo de lo que suele, Antonio Suárez porque pasan los años y sigue ahí, e Iván Crespo porque consiguió ser el mejor asturiano, demostrando que, como siempre, empieza muy fuerte la temporada.

En master 30 Rubén Rodríguez terminó satisfecho por la victoria, y Javi Díaz por haberla peleado hasta el final. Iván Fuertes también, por debutar en master 30 con podio ante dos de los favoritos para el Campeonato de España. Guti rozando el podio )en la que fue su primera experiencia ciclocrossera(. Y Edrosa 5º, a apenas medio minuto del podio, en una gran carrera. Esto promete.

En master 40 auténtica exhibición magistral del cántabro Manuel Gutiérrez "Thaler". Sin Taboada era el único vagón del tren de los buenos. Desde la salida marcó diferencias y siguió aumentando hasta meta. El debutante en 40 Jose Javier Rodríguez ya sabe lo que le espera, aunque confío en que con el paso de las carreras su nivel aumente tanto como lo hizo en temporadas anteriores.

Como dato curioso está la vuelta al ciclocross de dos viejos conocidos, ambos excorredores de El Pedal: Andrés Pérez y Borja Castro. Tras dos temporadas completas centrados en la carretera, la primera carrera siempre se hace dura. Andrés, ahora en Danima, fue pillando el ritmo poco a poco, mientras Borja, enrolado en uno de los mejores equipos del panorama sub 23 español, el Cuevas el Soplao, tuvo una gran actuación no siendo doblado hasta la última media vuelta. Llamó la atención su estilo, siempre agarrado a la parte baja del manillar.

En la siguiente entrada colgaré las fotos que pude sacar. Ni demasiadas ni demasiado buenas.

Para terminar, decir que esto solo fue el principio. La temporada es muy larga, y falta mucho aún para el 18 de enero. Muchas carreras, muchos rivales, muchos entrenamientos. Mucho ciclocross.

Traba.

6 comentarios:

Unknown dijo...

Pues eso hombre no te desnimes, que la temporada es muy larga y esto solo acaba de empezar.

saludos y a entrenar que nos va hacer falta...

alexja dijo...

solo comentar que yo no estube en Aviles pero el cadete que quedo sexto en Muskiz no fue Kevin Suarez si no Jaime campo

ciclocross dijo...

Solo decir que en cadetes faltaba Gonzalo Andres,que esta recuperandose de un esguince de tobillo.

Traba dijo...

Lo primero, gracias por comentar y gracias a Jose por los ánimos.

Alex, entono el mea culpa, puse lo que me sonaba por pura vagancia. Ya está corregido. Lo que espero que quede claro es que este año hay por lo menos dos opciones de medalla en Valladolid como dos soles.

Y puede que Gonzalo sea una tercera, habrá que verlo. Que se mejore!!

Anónimo dijo...

Tranqui Traba que esto acaba de comenzar y la temporada acaba allá por enero y eso está muuuuy lejos todavia. Animo que seguro que los vas a sorprender en tu terreno que precisamente no era el de Corvera.

Anónimo dijo...

Gracias por públicar simpre la crónica incondicionalmente y los malos resultados deben animarte para entrenar mas.
Un saludo.